Esta sopa es sencilla de preparar y está repleta de nutrientes, lo que la convierte en la comida perfecta para disfrutar después de una relajante sesión de meditación.
Fotografía: Markus Winkler |
Ingredientes:
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 cebolla picada
- 2 zanahorias picadas
- 2 tallos de apio picados
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/4 cucharadita de pimienta negra
- 6 tazas de caldo de verduras
- 1 lata de tomates cortados en dados, sin escurrir
- 1 paquete de guisantes congelados (a elección)
- 1/2 taza de perejil fresco picado
Instrucciones:
Calentar el aceite de oliva en una olla grande a fuego medio. Añadir la cebolla, las zanahorias, el apio, el ajo en polvo, la sal y la pimienta. Cocinar, removiendo de vez en cuando, hasta que las verduras se ablanden, unos 5 minutos.
Añada el caldo de verduras, los tomates troceados y los guisantes. Llevar a ebullición, reducir el fuego y cocer a fuego lento durante 15 minutos o hasta que las verduras estén tiernas.
Añada el perejil y sirva caliente.
Esta sopa también es una forma estupenda de aprovechar las verduras sobrantes. Si le sobran verduras, no dude en añadirlas a la sopa. También puedes ajustar los condimentos a tu gusto.
¡A comer!