La salud digestiva es esencial el bienestar general. Un sistema digestivo sano descompone los alimentos en nutrientes que el organismo utiliza para obtener energía, crecer y repararse. También ayuda a eliminar los productos de desecho del organismo.
Cada 29 de Mayo celebramos el Día Mundial de la Salud Digestiva. El objetivo de este día es concienciar sobre la salud digestiva y promover hábitos alimentarios y estilos de vida saludables.
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| Fotografía: julientromeur |
Hay muchas cosas que se pueden hacer para mejorar la salud digestiva. Algunas de ellas son
- Seguir una dieta sana que incluya mucha fruta, verdura y cereales integrales.
- Beber mucha agua.
- Hacer ejercicio con regularidad.
- Controlar el estrés.
- Dormir lo suficiente.
Yoga y meditación son dos prácticas de salud complementarias que también pueden ayudar a mejorar la salud digestiva. El yoga puede ayudar a mejorar la digestión aumentando el flujo sanguíneo a los órganos digestivos mediante el trabajo de la postura, en cambio, la meditación puede ayudar a reducir el estrés, lo que puede tener un impacto positivo en la digestión.
Si tienes problemas digestivos, es importante que acudas al médico para descartar cualquier enfermedad subyacente. Sin embargo, aunque padezcas una enfermedad, puedes hacer muchas cosas para mejorar tu salud digestiva mediante cambios en tu estilo de vida y prácticas complementarias como el yoga y la meditación.
He aquí algunas posturas de yoga y técnicas de meditación específicas que pueden ayudarte a mejorar la salud digestiva:
Postura de la vaca gatuna: Esta postura ayuda a mejorar la digestión al aumentar el flujo sanguíneo a los órganos digestivos. Para hacer la postura de la vaca gatuna, ponte sobre las manos y las rodillas con la espalda plana. Inspire y arquee la espalda, levantando la cabeza y el coxis hacia el techo. Exhale y redondee la espalda, metiendo la barbilla hacia el pecho. Repítelo de 5 a 10 veces.
Postura de la paloma: Esta postura ayuda a aliviar el estreñimiento y a mejorar la digestión. Para hacer la postura de la paloma, colóquese sobre las manos y las rodillas. Lleve la rodilla derecha hacia delante de modo que quede alineada con la cadera derecha. Extienda la pierna izquierda hacia atrás, manteniendo el pie flexionado. Inclínese hacia delante sobre la rodilla derecha, apoyando la frente en el suelo. Mantén la postura durante 30 segundos y repite con el otro lado.
Savasana: Esta postura es una forma estupenda de relajarse y reducir el estrés, lo que puede repercutir positivamente en la digestión. Para hacer savasana, túmbate boca arriba con las piernas extendidas y los brazos a los lados. Cierra los ojos y respira lenta y profundamente. Relaje el cuerpo y déjese hundir en el suelo. Mantén la postura durante 5-10 minutos.
Si es la primera vez realizando estas prácticas, es importante empezar despacio y aumentar gradualmente en tiempo. También es fundamental encontrar un instructor de yoga o un profesor de meditación cualificado que pueda ayudarte a gestionar las técnicas de forma segura y eficaz.